miércoles, 8 de noviembre de 2017

BIMILENARIO DE OVIDIO: RECREACIONES SOBRE EL TEMA DE DAFNE Y APOLO

Recreaciones de alumnos  a partir del tema de Apolo y Dafne.


T.B. (4º LATÍN)

       "Yo corría, no entendía por qué, pero algo me dijo que lo hiciese, él no se cansaba y seguía tras de mí. Me vi tan agobiada que no sabía a dónde iba, hasta que miré al frente y vi el río Peneo. No dudé en pedirle a mi padre ayuda, y eso hizo. Al poco tiempo tuve que parar e inmediatamente me sentí rara, totalmente cambiada; noté un cosquilleo en todas las partes del cuerpo, mi piel comenzó a oscurecerse y me di cuenta de que eso no era lo único que estaba pasando, estaba creciendo, y de mi cabeza salían hojas. ¿Hojas de árbol? Sí, hojas de árbol.
       Cuando me di cuenta de lo que sucedía, levanté la cabeza para mirar por dónde había estado corriendo para huir de ese tal Apolo; vi a alguien recogiendo pedazos de rama y juntándolos; seguro era él, no se cansaba. Cuando se levantó, vi qué era lo que había estado formando con dichas ramas: una corona.
       Eso hizo que algo en mi corazón se encendiera... La pena es que al colocarme esa corona en mi cabeza, dijo una frase que me dejó helada e hizo que una lágrima se derramara por mi mejilla antes de sentir nada por completo, antes de convertirme totalmente en un hermoso laurel"


L.C.A. (4º LATÍN)

       "Sentí como mis pies iban quedando paralizados a la vez que se convertían en raíces. Mis piernas se cubrían de corteza hasta llegar a mi cabeza, que pasó a ser una copa de árbol. Mis brazos transformados en ramas , mi cabello, eran las verdes hojas de laurel. Apolo lloraba al verme así, cogió una de mis ramas e hizo una corona para llevarme siempre con el." 



M.M.P. (3º CULTURA CLÁSICA)


"Ramas se hundían en mi pálida piel,

atravesando mis huesos y
hurgando dentro de mi cuerpo.
El dolor era indescriptible, mis párpados
se sentían pesados y un grito provocado
por mí, haciendo que aquel bosque
se llenara de desesperación y dolor.
Dos ramas que no fueron ni a mis brazos
ni a mis pies, se dirigían hacia mí.
Mi cuerpo se tensó y, sin poder
hacer nada, otro grito se hizo presente,
provocado por las ramas que se habían
incrustado en mis ojos.
Desde ahí no pude ver nada más, 
pero mi corazón empezaba a llorar, 
porque no estaba muerta, 
sino que me he convertido
en un árbol para siempre."



miércoles, 1 de noviembre de 2017

BIMILENARIO DE OVIDIO: HOMENAJE A LAS METAMORFOSIS

Condensado en un sólo folio, la autora, una alumna de cuarto curso de Latín, ha representado espléndidamente el mito de "Perdix", de las Metamorfosis de Ovidio.